Otra vez y por sexta vez, la Mannschaft disputará la final de una Eurocopa. Será en el mítico Ernst Happel de Viena (Prater para los amigos). Enfrente estará o España o Rusia, o lo que es lo mismo, una buena noticia para Alemania. Y es que ambas selecciones necesitan el balón para jugar. Todo lo contrario que los TeuToones, que sufren con la pelota en los pies y aniquilan a sus rivales con el otro fútbol: potencia física y eficacia de cara al gol. Los de Joachim Löw no quieren la pelota más que para lo estrictamente necesario: feroces contragolpes, chutes lejanos, balonazos a la olla con segunda, tercera o cuarta jugada y balón parado. No quiero decir con ello que la selección teutona sea favorita, pero la historia la delata.
De las 12 ediciones anteriores, Alemania no ha participado en dos (1960, 1964), no se ha clasificado en una (1968), ha caído en la primera fase en tres ocasiones (1984, 2000, 2004), ha caído en semifinales una vez (1988), ha sido subcampeona en dos ocasiones (1976, 1992) y ha campeonado tres veces (1972, 1980, 1996). De cada 4 Euros, gana 1, siendo el combinado con más títulos (3) y, lo que es más importante, lleva una progresión francamente buena (finalista en el Mundial 2002 y tercera clasificada en el Mundial 2006). Además, el proyecto de Löw no es nuevo, sino la continuación del buen trabajo realizado antes por Klinsmann que sólo Italia (quién sino) pudo erradicar aplicándole a la receta teutona dos tazas de desgaste físico y eficacia goleadora.


No caeré en el topicazo de Lineker pero sí en otro que me parece más cierto y apropiado: en el fútbol lo que importan son los goles. Alemania, hoy, es uno de los combinados con mayor pegada del fútbol internacional. Eso sí, es una versión BETA de lo que puede llegar al mundial de 2010. A la que Löw meta bajo palos a Adler, encuentre un central marcador en condiciones y dé con el mediocentro de toque necesario, esta selección será 100% alemana: eficaz, potente, corrosiva y, sobre todo, imparable. De momento estarán el domingo en la final. Algunos necesitan ser los mejores para intentar ganar (España, Holanda, Portugal), otros, en cambio, prefieren ser peores y levantar trofeos.
La gallina de piel: la peazo Eurocopa que estamos viviendo con partidazos de auténtico lujo. Después de las dos tristes ediciones anteriores, se ha recuperado la magia que envuelve estos torneos. Sólo me han faltado ver goles desde fuera del área.
Hay que sejir trafajando: el ridículo que hizo ayer la UEFA, o quién sea el responsable, con continuos cortes en la señal internacional de televisión en medio de una semifinal.
El dato: Alemania pierde la final de la Eurocopa cada 16 años. Perdió la primera en 1976 frente a la Checoslovaquia de Panenka. Tras dos entorchados, fue derrotada por Dinamarca en 1992 (1976+16). Y sí, llega la Euro 2008 (1992+16) y Alemania está ahí, en la final, esperando afianzar su derrota en la final de la próxima Eurocopa de 2024.
Apunte fotográfico: la chica celebrando un gol de la foto no es otra que Birgit Prinz, estrella alemana y mundial del fútbol femenino.
Apunte audiovisual: os dejo con el videoclip del grupo alemán Sportfreunde Stiller y su canción "'54, '74, '90, 2010", que hace referencia a los mundiales ganados por Alemania y al futuro campeonato de 2010. La crearon para el pasado Mundial bajo el título de "'54, '74, '90, 2006", pero ante el no éxito de Alemania, le han cambiado el título: http://www.youtube.com/watch?v=lCG7DRNM8zw