Ya me extrañaba que en Barcelona no se empezara a vender humo. Hasta ahora, a excepción del secreto a voces con Henry en el ojo del huracán que llevaba meses circulando de boca en boca, no había nombres, no había especulaciones, sólo había Champions y Arsenal. Pero una vez concluída la finalísima y los especiales de los campeones, vuelve la normalidad. Y lo normal cuando finaliza una temporada es hablar de altas y bajas. El amarillismo al poder. La rumorología.
Finalmente, no habrá Henry. Dicen que todo estaba hecho, que Pires (cuidado que puede quedarse en Londres) afirmaba jocoso que quedaría con Henry en Tarragona (por ser el lugar intermedio entre Villarreal y Barcelona), que el Arsenal ya buscaba sustituto e, incluso, que con la llegada de Henry a Barcelona explotaría una cadena de 'nueves' por toda Europa (Torres al Arsenal, Van Nistelrooy al Atlético, Crespo al Manchester, Shevchenko al Chelsea, Adriano al Real Madrid, Eto'o al Milan, etc.). Así pues, el primer bluf de Laporta ha llegado. 'Titi' Henry no jugará "jamás" en España.
Sin Henry en las portadas, los nombres de posibles altas azulgranas se han disparado. Según afirman todos los medios, en la cumbre Laporta-Txiki-Rijkaard celebrada ayer en las oficinas del Camp Nou, se acordó que el Barça busca a dos defensas (un central zurdo y un lateral zurdo) y un '9' (que sustituya la ahora reconocida "baja sensible" de Larsson). Y, cómo no, las listas ya están en todos los medios. Fotos, perfiles y "a favor y en contra" dominan estos días las primeras páginas de los diarios deportivos. Defensas: Zambrotta, Gallas, Gabriel Milito, Chivu, Daniel Alves, Gonzalo Rodríguez. Arietes: Crespo, Forlán, Morientes, Diego Milito, Van Nistelrooy, Torres, Trezeguet, Ibrahimovic.
El siguiente orden del momento lo marcan los jugadores que deben renovar. Así, este año nos encontramos con Giuly, Oleguer y Márquez. El galo parece que en las próximas horas firmará un contrato de 1+1 (el segundo año dependerá de unos objetivos mínimos en forma de partidos disputados) con un aumento de salario incluído. Con Oleguer parece que tampoco habrá problemas. Al llegar a Márquez ya empiezan las dudas y su caso se une con el de "las posibles bajas" que puedan causar "la intromisión de otros clubes en los quéhaceres del Barcelona". Así, junto a Márquez, hay quien sitúa a Deco. Márquez tiene ofertas del Chelsea y del Milan y lleva meses negociando su ampliación de contrato (es de los pocos que todavía no ha ampliado sus ganancias desde que llegó a Barcelona). Con Rafa concentrado con los aztecas, la pelota ha llegado a Txiki que debe mover ficha rápido si no quiere quedarse sin el central titular del equipo bicampeón. Los mal pensados creen que el Barcelona desea vender a Márquez a cambio de mucha pasta y sustituirlo por Chivu. Error, grave error.
El tema Deco es parecido al de Márquez. En Can Barça hay quien piensa que Deco ha llegado a la cima de la ola y que su rendimiento va en descenso. Ofertas por él no faltan y podría ser una de las bajas sonadas del verano. Es más, el hecho de que Deco quisiera pronunciarse públicamente a favor de Sandro Rossell cuando explotó la guerra interna culé todavía escuece y mucho. Según han afirmado estos días especialistas del mercado internacional como Paco Aguilar, Deco está en el mercado y podría irse si llega una buena oferta. No hay que olvidar que Mourinho anda tras él desde que fichó por el Chelsea.
Así está el panorama actualmente en Barcelona. En las próximas horas, seguro que aparecen más nombres que interesan al "cuerpo técnico". Lo que ellos parece que no entienden es que la afición prefiere la continuidad de Puyol, Márquez, Deco, Ronaldinho, Xavi, Iniesta, Eto'o y Messi a la llegada de nuevos jugadores. Al fin y al cabo, los campeones son ellos, y no Laporta, Soriano y demás.
1 comentario:
En el fondo, ¿qué sería de nosotros si en verano, al lado de la toalla en la playa, o en la terracita de la piscina no tuviéramos el periódico con los rumores y "serpientes" de verano tan míticas?
Hablando sólo del Barça, creo que, en puridad, no necesita más que un par de retoques. Un delantero que supla la marcha de Larsson (y suplente además) y al menos un lateral, a poder ser que juegue en ambas bandas (o dos laterales). El estilo lo tiene, el equipo y el sistema también, las figuras por supuesto... sólo le queda seguir perfilando el banquillo y completando una plantilla maravillosa.
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